Luego de revisar todos los antecedentes científicos que demuestran que el glifosato puede usarse en la agricultura sin efectos indeseados para la salud o el ambiente, la Comisión Europea renovó la aprobación de uso del ingrediente activo por 10 años más.
La decisión la toma luego que las agencias científicas europeas EFSA y ECHA, junto a las agencias de los estados miembros de la Unión Europea concluyeran que el glifosato no es carcinogénico y puede utilizarse de manera que no cause efectos adversos sobre la salud y el medio ambiente como controlador de malezas. La EFSA respaldó su decisión con un informe que incluye 2 mil 400 estudios clínicos y 32 meses de estudio por parte de 90 expertos de las autoridades regulatorias de los 27 miembros de la UE.
La autorización europea incluye la condición de que el uso del glifosato como desecante previo a la cosecha no será permitido, pero que su uso como controlador de maleza sí está autorizado y se deben considerar medidas de mitigación de riesgo.
El glifosato es un herbicida que ha estado disponible para el uso de los agricultores de Chile y el mundo por más de 40 años, permitiendo obtener cosechas más productivas y eficientes al disminuir la competencia con las malezas por los nutrientes, agua, luz y espacio. Los herbicidas se encuentran entre los productos fitosanitarios más estudiados del mundo, sujeto a rigurosas pruebas y supervisión por parte de las agencias regulatorias y con estudios científicos que respaldan su seguridad si son utilizados de manera correcta.
Conoce más sobre la decisión de la Comisión Europea en:
https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/es/qanda_23_5793